Representaciones no moralizantes del sida
[...] ¿Por qué me siento traicionado con esta escena? Por un motivo, si el amor es amor y no importa si eres gay o heter, quisiera saber entontces por qué Jonathan Demme no muestra a Andy metiéndose en la cama con su novio Miguel (Antonio Banderas) mientras Callas está cantando. Después de todo, ¿no decía Joe que no tenía ni idea de ópera? por lo tanto, ¿de quién es la subjetividad que aparece representada aquí? La respuesta es, por supuesto, la del espectador, construida en la película de Demme como una subjetividad hetero y sin sida. Puede que ese espectador no tenga tampoco ni idea de ópera, pero Andy explica esta aria en concreto lo suficientemente bien como para que cualquiera entienda que los temas de la ópera -al igual que los de la película de Demme- son universales. Para lograr esto, Demme ha ido alejándose de la subjetividad con la que había comenzado haciéndola aparecer como fascinante, diferente e incomprensible a pesar de que, supuestamente, se estuviera apelando a lo universal. Demme le roba la Callas a la agonizante reina de la ópera (Andy), quien nos abre su subjetividad a través de esta identificación con la diva sólo para cedérsela inmediatamente a Joe y a su mujer e hija, y de ese modo implícitamente a todas las unidades familiares "normales" [...]
Muchos de nosotros nos fijamos en la escena de la ópera de Philadelphia es porque es el único momento en el que podemos reconocer al personaje de Andy como marica. Si me siento traicionado por esta escena es porque, una vez que se muestra este único significante de la queerness de Andy, es despojado de su especificidad queer. Y lo que parece que Demme quiere decir es que tú tienes que prescindir de lo que hace marica a un marica para conseguir que todo el mundo sienta pena por el hecho de que él vaya a morir.
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[...] Durante un breve periodo de tiempo, algunos científicos asumieron que el síndrome estaba relacionado intrínsecamente con la homosexualidad, aunque un saber "científico" de la homosexualidad habría comprendido inmediatamente que no existe nada intrínseco a la homosexualidad, puesto que, intrínsecamente, la homosexualidad no es nada en absoluto [...]
Aún así, esta preponderancia de imágenes del sida como una enfermedad gay ha convivido, ya durante muchos años, con informaciones tales como que el sida se transmite tanto por relaciones sexuales heterosexuales como homosexuales, que también se transmite por compartir agujas cuando se toman drogas, a través de transfusiones de sangre y el uso de productos sanguíneos, y de madre a hijo [...] Cuando la estrella del baloncesto Magic Johnson descubrió que era seropositivo a finales de 1991, dijo que no había mantenido relaciones sexuales seguras porque pensaba que el sida era una enfermedad gay [...]
Poco más tarde de que volviera a Los Angeles Lakers en 1992 se le obligó a que se retirara por segunda vez [...] dudo que aquellos jugadores creyeran realmente que Magic era gay. Creo, más bien, que al decirlo, pensaban que podían afirmar que "Esta enfermedad no es mi problema. No tengo que preocuparme. No tengo que usar condones cuando juegue fuera y mantenga un montón de relaciones sexuales".
"El sida no es mi problema". Esta afirmación (o pensamiento) es, sin duda, la fórmula más extendida, la más tenaz y la más peligrosa de esta pandemia [...]
La mayoría de las personas no dicen explícitamente "el sida no es mi problema", sino que traducen esta afirmación en algo parecido a "el sida es el problema de otras personas" [...]
Hoy en día es de Perogrullo decir que la construcción de binomio nosotros/ellos es el mayor obstáculo que hay que superar, y que debemos aceptar que el sida es nuestro problema [...]
Lo que necesitamos ahora es la autorrepresentación de nuestra desmoralización [...]
FUENTE: El artículo completo se encuentra en CRIMP, D., Posiciones críticas, Madrid, 2005, pp. 123-135.