
Reza ABDOH, Quotations froma Ruined City, 1994
SIDA y Posmodernismo
El trabajo teatral de Abdoh, especialmente sus producciones posteriores a su positivo en VIH, con su compañía Dar A Luz marcan un significativo corte con el teatro posmodernista representado por Wilson, Foreman y el trabajo del Wooster Group en los 80. La teoría cultural posmoderna de los 80 proponía o razionalizaba una retirada desde el punto de vista de la lógica respuesta del colapso de la estética en la política. Al mismo tiempo, Hal Foster, por ejemplo, argumentaba que el arte político, "embebido en un código retórico", era "problemático en la sociedad occidental de finales del siglo XX, donde "no hay representaciones simples de la realidad". Esta lectura de la incertidumbre representacional de la sociedad de finales del siglo XX es un espejo de la descripción de Roland Barhes, dentro de la discusión de la teoría literara, de la "verdaderamente revolucionario" acto de "resistirse a fijar el significado".
Philip Auslander expandió la defensa que Foster había hecho de la incertidumbre en el análisis de la obra referencial del Wooster Group, Rout 1 & 9, la que según él, fue, en parte, la respuesta a la crisis del teatro político precipitada por "la obvia inadecuación de las estrategias del arte político de las vanguardias históricas de principios del siglo XX y de los años 60". En el teatro posmoderno el rechazo a fijar el significado coincide con la firme atencón sobre el contenido, o, cuando la cuestión sobre el contenido es inevitable, con la ironía como el único punto de vista [...] La epidemia del sida cambió la naturaleza de la performance vanguardista irrevocablemente, forzando a los artistas a considerar y analizar no solo el horror de la mortal enfermedad, sino las implicaciones sociales y políticas de la cuestión de la homofobia y el racismo ligados con la crisis del sida.
FUENTE: Traducción de BELL, J., "AIDS and Avant-garde Classicism: Reza Abdoh's Quotations from a Ruined City", en MUFSON, D. (ed.), Reza Abdoh, Maryland, 1999, pp. 140-141
Cuerpo decadente
[...] En los trabajos de Reza Abdoh, que también murió prematuramente de sida, los fantasmas mediáticos, históricos y teatrales entraban en una simbiosis entre el show y la provocación y ofrecían un gran guiñol sangriento y una tristeza inconmensurable. Su teatro era barroco: mostró una sensorialidad brutalmente directa y una búsqueda de la trascendencia, la avidez de la vida y la confrontación con la muerte. Sarajevo, un hospital y el espectáculo del horror de la institución pequeña burguesa se convirtieron en mal augurio de un mundo que ha perdido el juicio y en el que domina la frialdad, el dolor, la enfermedad, el tormento, la muerte y el deterioro. De modo distinto al teatro de Wilson, estas figuras son fantasmas: se encuentran despegadas de las coordenadas de espacio y tiempo, y se integran únicamente en la muerte y el dolor corporal; irradian una amenaaza y, al mismo tiempo, comunican una pasión que inspira compasión. En su trabajo Quotations from a Ruined City Abdoh proyectó sobre la escena, de un modo provocador y radical, un panóptico de depravaciones sexuales, morales y políticas, con el objetivo de criticar la tan aclamada reflexión en el teatro y revolverse vehementemente contra la tan extendida autoreflexión. Para él se trataba de un posible mensaje directo, muy americano, un festival de sentimientos que entendía como catarsis y al cual pertenecía la consciencia de la muerte como condición y placer del cuerpo. Para Abdoh no era tan importante el horror chocante de su tan comentado teatro (de hecho su efecto era suave en comparación con los efectos de las películas de terror), sino el teatro como "lugar para dar forma a las ideas, una especie de foro para el interambio de ideas"
FUENTE: LEHMAN, H. T., Teatro posdramático, Murcia, 2013, pp. 378-379